7 argumentos taurinos que valen menos que un tema de Leticia Sabater


Cansado de escuchar siempre los mismos tópicos de esta gente, he decidido hacer una recopilación de los más repetidos, convertir esto en una guía abierta para que hagáis copia y pega cada vez que tengáis que responder a tales disparates. Vamos a ello:

1. El toro no sufre.
Este cada vez se escucha menos, pero aún así sigue siendo un clásico de la caspa. Respuesta: El toro, como mamífero que es, tiene sistema nervioso, que se encarga de que sienta un dolor horrible cuando le proporcionan los banderillazos y le clavan picas. Todo lo demás, son teorías de mierda que se encargan de inventarse para tratar de defender su mutilación.

2. El toro ha nacido para eso.
Esta también sale a menudo y, y va de la mano de "son animales, no personas". Normalmente, si os la sueltan, mejor abandonar el debate, porque estáis ante una persona retrógada y misógina, a la cual, ni los mejores ni más inteligentes argumentos van a hacer cambiar su perspectiva de que: El toro está ahí sólo para su entretenimiento, el camarero está sólo para hacerle caso a él, su mujer está ahí sólo para darle hijos y fregarle, sus hijos han nacido para jugar al fútbol pero su entrenador es un hijo de puta y no les saca... En fin, ya sabéis de qué tipo de persona hablo. 
Posible respuesta: Los toros ni ningún animal están ahí para que te diviertas recreándote con su sufrimiento, busca otro tipo de entretenimiento que no sea nocivo para ningún ser vivo, que ya eres una persona adulta con capacidad de razonar (espero).

3. Si no se torea, se extinguen los toros.
¡Menos mal que en España nos torean nuestros políticos, si no, nos extinguiríamos! Este argumento es hermano del anterior, pero va más allá: Da por hecho que, no sólo están ahí para ser toreados, sino que, en el caso de no hacerlo, se extinguen. Este tipo de persona ha nacido en la cumbre de los nichos sociales, probablemente no ha sufrido discriminación por su color de piel, ni por su sexualidad o por su sexo. Siempre ha tenido a todo el mundo bailándole el agua, por lo que se ha creado una realidad alternativa en la que, todo lo que concierne a su persona es muy importante. De esta forma, se crea una imagen de superioridad por su sexo, por su color de piel, o por lo que sea. Y si ya tiene superioridad respecto a los humanos, respecto a los animales forma parte de un mantra de superioridad especista que le hace pensar que los animales sólo son para que el coma, para que él se vista, para que él se divierta. Hasta tal punto que, todos los animales que no cumplan esas cosas, ¿por qué iban a seguir existiendo? 
Respuesta: Nadie torea jirafas, ¿se han extinguido? Nadie torea topos, ¿se han extinguido? Hay muchos animales que no se suelen comer, ni usar para divertimento, domesticarlos o hacer ropa, que, oh, sorprendentemente, no se han extinguido. Otra cosa es que los ganaderos se dediquen a matarlos a todos en el caso de que no haya tauromaquia, lo cual es contra lo que luchamos, que se les deje de matar deliberadamente. Además, tanto que decís que no se les mata por diversión, ya que luego se come la carne, si tanto os gusta el rabo de toro, ¿acaso lo vais a dejar de comer si se prohíbe la tauromaquia? Se seguirá produciendo, por lo que se seguirán criando toros para que puedas comer un buen 'rabo' que sabemos que te encanta.


4. No se le maltrata, vive muy bien.
El 'arguñado', el argumento cuñado.
Respuesta: Pues nada, vamos a matar al Rey, que lleva ya muchos años viviendo muy bien, y va tocando. A ver, ¿qué sentido tiene la forma en la que vives, si vives con el propósito de que un asesino te torture y mate lentamente mientras un grupo de energúmenos le vitorea?

5. Mucho quejarse de los toros, pero luego bien que coméis carne.
Es como decir "Mucho quejarse de la descongelación de los polos por el calentamiento global, pero bien que comes helados". Un sinsentido. 
Respuesta: Obviando que gran parte de los animalistas son veganos, el resto distinguimos entre matar para alimentarse y matar por diversión. Lo segundo es propio únicamente de mentes enfermas. 


5. Es una tradición y un arte.
El argumento que más se ha mantenido en el tiempo, ya que en sí mismo no implica nada malo, es un argumento limpio, pero vacío.  
Respuesta: Cuando justificas lo que hacen por ser una tradición, es porque no tienes ningún argumento real y objetivo para llevarlo a cabo. Esclavizar, el derecho de pernada, las batallas de gladiadores... Son tradiciones retrógradas a las que el progreso y el razocinio se han llevado por delante. Tu tradición será la siguiente.


6. Mueve mucho dinero y puestos de trabajo.
El argumento económico que siempre sale ahí para salvar el día. Muy bonito todo, si no fuera rotundamente falso.
Respuesta: Tú hablas de dinero, yo hablo de ética, lo cual ya dice la clase de persona que somos cada uno. Por otra parte, este tipo de 'espectáculos', si así se les puede denominar, dependen en gran parte de las subvenciones del Estado y de los ayuntamientos de turno, por lo que, no resultan rentables, sino que son un agujero financiero. En el caso de todas las personas que perderán su puesto de trabajo, pues qué se le va hacer, todos los verdugos que perdieron su trabajo cuando se prohibió la pena de muerte se tuvieron que buscar la vida, que hagan lo mismo. Además, en los años que corren y durante las siguiente décadas, están surgiendo cientos de trabajos que antes no existían y que alguien tendrá que cubrir.


7. Si no te gusta no lo veas.
Ya está. El último argumento de todos. El definitivo. El falso 'yo no hago daño a nadie'. Porque claro, el toro se muere de viruela, ¡venga, hombre!
Respuesta: Bueno, pues voy a matar yo bebés en mi casa, y como nadie me verá, pues a nadie le molestará. Que tú no veas todas las mujeres que lapidan en ciertos países por adulterio, no significa que lo hayan dejado de hacer. O bueno, que sigan haciéndolo, porque aunque a mí no me gusta, no lo veo y ya está. Menudo argumento inmovilista y totalmente contrario a la empatía, que es lo que realmente debería diferenciarnos de los animales, aunque no creo que sea tu caso. Por otra parte, la mayoría de estos actos se mantienen gracias a dinero público, sí, dinero de todos, también de los 'excéntricos' a los que no les gusta, esos locos pensadores, que están pagando impuestos para que te puedas divertir viendo sufrir a un animal.



A menudo a los antitaurinos se nos echan en cara las formas, este es el argumento bonus track, el comodín... Porque claro, un asesino se merece que le pidamos por favor, que deje de matar. Dicen que nos alegramos de la muerte de un torero. En mi caso, yo personalmente no, pero pena, pena, ninguna. El torero ha decidido estar ahí jugándose la vida frente a un animal que puede ser peligroso. Y ha sido el animal el que no ha podido elegir. La muerte de un torero me da la misma pena que los que mueren haciendo balconing, se han matado porque les ha dado la gana llevar a cabo una estupidez, aunque al menos, estos últimos no pretendían hacer daño a nadie.